MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL

Informe: Igualdad de Oportunidades en el Mundo Laboral, Una Cuestión Política. Diez Años de Historia de la CTIO

(Segunda y Ultima parte)

El Ministerio de trabajo, Empleo y Seguridad Social organizó el Informe: "Igualdad de oportunidades en el Mundo Laboral, Una Cuestión Política. Diez Años de historia de la CtIo". Esta documentación analiza la evolución histórica de la Comisión tripartita de Igualdad de trato y oportunidades entre varones y Mujeres en el Mundo Laboral y tiene como principales objetivos: promover la igualdad de oportunidades entre mujeres y varones, ejercer el diálogo social, y revalorizar la cultura del trabajo para permitir el diseño de políticas públicas democráticas y participativas a fin de lograr empleo decente con igualdad de oportunidades en todo el territorio nacional.

PALABRAS PRELIMINARES

El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social desarrolló el Informe titulado: "Igualdad de Oportunidades en el Mundo Laboral, Una Cuestión Política. Diez Años de Historia de la CTIO".

Debido a la extensión de este estudio y a la importancia y necesidad de difundir la totalidad de sus contenidos, el mismo se publicó en dos ediciones.

En la edición anterior (Suplemento Actos de Gobierno N° 53 publicado el 14 de septiembre de 2009) se dedicó a precisar todo lo concerniente a la presentación, introducción, principales antecedentes políticos e históricos de la Comisión Tripartita de Igualdad de Trato y Oportunidades entre Varones y Mujeres en el Mundo Laboral (CTIO), sus objetivos, principios y diversos hechos de relevancia entre 1998 y el 2002; destacándose en este contexto la Ley de Cupo Sindical Femenino.

Esta segunda y última parte se referirá a las limitaciones en el acceso de mujeres y varones al mundo laboral en igualdad de oportunidades, donde se abordarán las siguientes problemáticas: ética del cuidado, responsabilidades familiares compartidas y brecha salarial.

Al mismo tiempo, se tratará todo lo vinculado a la etapa del fortalecimiento de la CTIO, a saber: el diálogo social tripartito, la recuperación de la memoria, el período del Consenso de Washington al Consenso de Quito, la federalización de las acciones, la creación de la Oficina de Asesoramiento en Violencia Laboral (OAVL), la conformación de la Coordinación de Equidad de Género e Igualdad de Oportunidades en el Trabajo (CEGIOT) y las articulaciones institucionales.

Finalmente, se describirán diversas reflexiones de los principales actores involucrados en la temática.

LIMITACIONES EN EL ACCESO DE MUJERES Y VARONES AL MUNDO LABORAL EN IGUALDAD DE OPORTUNIDADES

Etica del cuidado

El cuidado de las personas ha estado ancestralmente en manos principalmente de las mujeres, fundamentado en un supuesto rol natural inherente a la condición femenina.

Trasladando así el hecho biológico de la reproducción (de la maternidad) al ideológico-político de maternaje, deviniendo las mujeres en cuidadoras universales.

Como la inserción laboral hace a la identidad, al capital social y tiene en el sistema capitalista-mercantilista un valor monetario, se visualiza que el lugar de la mujer como cuidadora tiene un "prestigio" meramente discursivo, sin que se valore en todas sus dimensiones el significado de este compromiso de cuidado de las personas, que hoy se ha dado en llamar economía del cuidado, también, cultura del cuidado; cultura que debe ser incorporada "naturalmente" en las mujeres y que nunca había sido evaluada en términos económicos.

El valor económico de esos trabajos que realizan las mujeres, en el hogar y en la comunidad, reemplazando los servicios de los gobiernos, los Estados y las empresas, que se constituyen en sostén social y enfrentamiento a la pobreza y a las crisis, es hoy día calculado como un aporte invisibilizado al erario de las naciones que constituye hasta un 30% del PBI.

Indicadores socioeconómicos (1)

Teniendo presente 31 aglomerados urbanos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) y correspondiendo el período analizado al primer trimestre 2007 se destacan los siguientes valores:

• Tasa de actividad: 59,8%.

- Tasa de actividad de mujeres: 48,0%.

- Tasa de actividad de varones: 73,4%.

• Tasa de empleo: 54,0%.

- Tasa de empleo de mujeres: 42,1%.

- Tasa de empleo de varones: 67,7%.

• Tasa de Desocupación: 9,8%.

- Tasa de desocupación de mujeres: 12,5%.

- Tasa de Desocupación de varones: 7,8%.

Acerca de las responsabilidades familiares compartidas

Los cambios registrados en las estructuras demográficas y económicas mundiales han originado nuevas situaciones en el mercado laboral y en la vida familiar.

La necesidad de armonizar tiempo de trabajo y tiempo de familia es un principio que cabe plantearse en todas las culturas.

La incorporación de la mujer al mercado de trabajo ha hecho necesaria la configuración de un sistema que contemple las nuevas relaciones sociales surgidas, así como un nuevo modo de cooperación y compromiso entre mujeres y varones.

En la República Argentina, el Informe Nacional para la Conferencia de Beijing recomienda la inclusión de normas que consagren, en forma expresa, el principio de la participación conyugal para la igualdad de derechos, deberes y oportunidades de ambos cónyuges.

Por consiguiente, los trabajadores y trabajadoras necesitan combinar más armoniosamente estas responsabilidades familiares con sus responsabilidades laborales.

----------------

(1) Fuente: Tasa de empleo: calculada como porcentaje entre la población ocupada y la población total (de 14 años y más). Tasa de desocupación: calculada como porcentaje entre la población desocupada y la población económicamente activa (de 14 años y más).

Indicadores socioeconómicos (2)

• 79,2% de las mujeres trabajan.

• 61,2% de las mujeres que son madres trabajan.

• Las mujeres madres que trabajan aportan al hogar el 47,6% del ingreso total.

• Para el 60% de las mujeres madres, las condiciones laborales son desfavorables.

• Sólo 8 de cada 100 mujeres madres ocupan un puesto profesional.

• El 39,7% de las mujeres madres tienen trabajos informales, contra el 29,7% de las mujeres no madres.

• La mitad de las mujeres trabajadoras tienen una ocupación informal, en tanto que lo mismo ocurre con el 42% de los varones ocupados (3).

• Casi un quinto de todas las mujeres ocupadas trabajan en hogares particulares como empleadas domésticas (4).

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha incorporado estas necesidades en el Convenio sobre los Trabajadores con Responsabilidades Familiares de 1981 (NΊ 156), y su Recomendación sobre los Trabajadores con Responsabilidades Familiares de 1981 (NΊ 165).

La OIT propone que los sindicatos se ocupen de estas cuestiones mediante la negociación colectiva, en especial negociando cláusulas sobre:

• Licencia por paternidad.

• Licencia familiar.

• Servicios de atención familiar.

• Protección contra la discriminación y la represalia.

Estas cuestiones han tenido avances en el debate público, generando mayor concientización y capacidad organizativa por parte de los trabajadores y sus representantes, pero aún son una cuenta pendiente.

Las y los integrantes de la CTIO están trabajando en el diseño de una campaña de sensibilización sobre las Responsabilidades Familiares Compartidas y la necesidad de que existan Centro de Cuidado Infantil en los lugares de trabajo para garantizar el acceso igualitario de mujeres y varones a los puestos de trabajo.

En la República Argentina aún no está reglamentado el artículo N° 179 de la Ley de Contrato de Trabajo, que plantea: "...en los establecimientos donde preste servicios el número mínimo de trabajadoras que determine la reglamentación, el empleador deberá habilitar salas maternales y guarderías para niños hasta la edad y en las condiciones que oportunamente se establezcan".

Ningún convenio colectivo de trabajo contempla hasta el momento en sus cláusulas el cuidado de niñas y niños.

Brecha salarial

La brecha salarial es un cálculo estadístico del porcentaje de los ingresos de las mujeres en comparación con el de los varones, el que sólo puede ser comprendido en el marco de las inequidades de género.

Existen mitos que refuerzan esta diferencia salarial, a saber:

• Las mujeres dejan de trabajar cuando son madres.

• Las mujeres obtienen un ingreso secundario, adicional al principal, que es el masculino.

• Las mujeres tienen menos preparación.

• A las mujeres no les interesan los cargos de jefatura.

• Las mujeres son, para los empleadores, más caras que los varones.

Existen estudios que muestran que los sectores de la economía que tienen una alta proporción de mujeres, perciben salarios inferiores a los de mayor concentración masculina, y en esos sectores masculinos, cuando los trabajos se feminizan, las remuneraciones bajan.

La diferencia entre los ingresos de mujeres y varones no necesariamente se reduce a que por el mismo cargo se pague menos a las mujeres, sino que conllevaría una discusión más profunda sobre las actividades y habilidades que se valoran de manera diferencial y están socialmente vinculadas a la construcción cultural de qué espacios ocupan las mujeres (reproductivo, atención, cuidados) y qué espacios ocupan los varones (público, productivo).

Se debe tener en cuenta la mayor carga de las mujeres en relación con la atención de las responsabilidades familiares y las domésticas que culturalmente les son asignadas, ya que inciden de manera directa en la cantidad de horas disponibles para desarrollar actividades rentadas.

----------------

(2) Fuente: Anuario de la Maternidad 2008 sobre la situación laboral de las madres en la República Argentina publicado en el diario Clarín el 7 de diciembre de 2008, "Mujeres profesionales: la mitad deja el trabajo cuando son madres".

(3) Fuente: "Aportes a una nueva visión de la informalidad laboral en la Argentina". Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento/Banco Mundial; Subsecretaría de Programación Técnica y Estudios Laborales del MTEySS. Agosto de 2008.

(4) Ibidem.

Enfoque estructural: cambios en la participación femenina en el empleo

Brechas salariales de varones y mujeres

En pesos corrientes. total de aglomerados relevados (5)

En el total de trabajadoras/es cubiertos por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), la brecha salarial entre varones y mujeres es del 20%, es decir, las mujeres perciben salarios un 20% menor al de los varones ocupados (7).

Remuneraciones promedio para el total de asalariadas/os registradas/os privadas/os (mayo de 2008) (8)

• Mujeres: $2042.

• Varones: $2735.

• Brecha salarial: 25%.

Expresada como déficit. Cuánto les falta a las mujeres para llegar a la remuneración de los varones.

--------------

(5) Fuente: MTEySS-SSPT y DGEyEL en base a EPH (INDEC).

(6) Ibidem.

(7) Fuente: Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial, Subsecretaría de Programación Técnica y Estudios Laborales (SSPTyEL). Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, en base a SIJP.

(8) Fuente: Observatorio de Empleo y Dinámica Empresarial, Subsecretaría de Programación Técnica y Estudios Laborales (SSPTyEL). Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, en base a SIJP.

ETAPA DE FORTALECIMIENTO DE LA CTIO

Desde el año 2003, por decisión de la máxima autoridad del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social la CTIO es presidida por Olga Martín de Hammar.

La experiencia de la CTIO en este período ha puesto de manifiesto la voluntad de las/los representantes de los sectores que la integran de mantenerse como firmes protagonistas del diálogo a favor de la igualdad de oportunidades en el mundo del trabajo.

Se han superado contradicciones históricas entre los sectores, en favor de objetivos y desafíos comunes que redundan en reivindicaciones y mejoras para todos los sectores del mundo laboral.

Un factor indispensable para alcanzar la paridad entre mujeres y varones es asegurar el acceso igualitario sin discriminación de ningún tipo, a los recursos sociales, culturales, políticos, económicos, técnicos, tecnológicos y simbólicos.

Temas como pobreza, discriminación y migraciones, el trabajo en un mundo globalizado, o el empoderamiento de sectores invisibilizados se han abordado en un respetuoso diálogo social.

Integrantes de la CTIO a diciembre de 2008

Sector gubernamental

• Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.

• Consejo Nacional de la Mujer y Programa "Juana Azurduy" del Ministerio de Desarrollo Social

• Ministerio de Salud.

• Secretaría de Derechos Humanos.

• INADI y Programa "Las Víctimas contra las Violencias" del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos.

• Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto-Area Mujer.

• Dirección de Relaciones con la Comunidad" del Ministerio del Interior.

• "Programa Ambiente, Género y Desarrollo" de la Subsecretaría de Coordinación de Políticas Ambientales de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.

Sector sindical

• Confederación General del Trabajo (CGT).

• Central de los Trabajadores Argentinos (CTA).

Sector empresario

• Unión Industrial Argentina (UIA).

• Cámara Argentina de Comercio (CAC).

• Confederación General Económica de la República Argentina (CGERA).

• Confederación General de la Producción (CGP).

• Federación Agraria (FAA).

• Confederación General de la Industria (CGI).

• Confederación General de Comercio y Servicios de la República Argentina (CGCySRA).

• Cámara de Comercio, Industria y Producción de la República Argentina (CACIPRA).

• Asamblea de la Pequeña y Mediana Empresa (APYME).

• Federación de Cámaras de Mujeres PyMEs y Micro Emprendimientos.

• Sociedad Rural Argentina (SRA).

• Cámara Argentina de Emprendedores (CADE).

• Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

• Frente Agropecuario Nacional (FAN).

• Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN).

Diálogo social tripartito para la igualdad de trato y oportunidades entre mujeres y varones en el ámbito laboral

En febrero de 2009, las y los integrantes de la CTIO renovaron su compromiso de trabajo, mediante la elaboración de un nuevo acuerdo marco que constituyó lo que se dio en llamar "Diálogo Social para la igualdad de trato y oportunidades de mujeres y varones en el ámbito laboral."

Los ejes principales se destacan a continuación:

• Profundizar la democracia con las políticas de igualdad de oportunidades para todas y todos considerando que sin justicia social y sin equidad de género no hay democracia.

• Garantizar a través de los derechos colectivos en el ámbito del trabajo los derechos individuales de trabajadoras y trabajadores.

• Promover que el Estado sea garante de la paridad en la distribución de las riquezas nacionales, amparando a todos sus ciudadanos y ciudadanas en su derecho de acceso a los recursos naturales, sociales, culturales, económicos y técnicos.

• Colaborar en la capacitación sindical de trabajadoras y trabajadores fortaleciendo las organizaciones gremiales, respetando su autonomía y democracia interna e incluyendo la perspectiva de género en sus programas a fin de lograr la participación igualitaria de las trabajadoras en los procesos de negociación colectiva y el cumplimiento de la Ley de Cupo Sindical.

• Eliminar las inequidades de género en el ámbito laboral, efectivizando la transversalidad de género en todos los organismos públicos dando cumplimiento a los compromisos asumidos con los organismos supranacionales.

• Promocionar en el sector empleador las políticas de "buenas prácticas" laborales, para el logro del trabajo digno; así como comprometerlo en el fortalecimiento institucional y político de las mujeres empresarias para lograr la equidad al interior del sector.

• Poner en valor la economía del cuidado, para contrarrestar la invisibilidad histórica del sector femenino, reconociendo sus aportes a la producción y reproducción y el sostenimiento de la vida cotidiana.

Estos puntos constituyen la base estratégica del Diálogo Social Tripartito para la Igualdad de Oportunidades e implican la transversalización del enfoque de género en las políticas públicas para erradicar definitivamente las discriminaciones persistentes.

Recuperación de la memoria: la mujer en la revalorización de la cultura del trabajo

Como política permanente llevada adelante por la CTIO se conmemora cada 8 de marzo el "Día Internacional de la Mujer Trabajadora", con un acto público que se adentra en la historia de las luchas del pueblo argentino, profundizando el rol de las mujeres trabajadoras en la construcción de una nación justa y soberana.

Se organizaron actos de reconocimiento a mujeres destacadas por sus respectivas prácticas, desde el convencimiento de que es preciso visualizar las luchas de las mujeres en la Argentina para poder redefinir su participación en la construcción política y social del país e incorporar nuevas miradas en el diseño de políticas que partan de considerar a mujeres y varones en tanto ciudadanos y ciudadanas con derechos.

De esa forma se sucedieron las siguientes conmemoraciones:

• 2003: Día Internacional de la Mujer Rural.

• 2004: Reconocimiento a las Mujeres que Hicieron Historia.

• 2006: Reconocimiento a las Trabajadoras Comunitarias.

• 2007: La revalorización de la Mujer en la Cultura del Trabajo

Mujeres premiadas

• Emma Candia (Secretaria General de Unión Personal Civil de la Nación/Ministerio de Justicia; 1956).

• Irma Othar (Miembra del Consejo Directivo de la Federación Sindical Mundial/Secretaria General de la Unión de Mujeres Argentinas/Miembra del Consejo Directivo de la Federación Democrática Internacional de Mujeres. Dirigente sindical del gremio de la carne).

• Angela Orcesi (Secretaria Adjunta del Consejo Directivo del Sindicato de Trabajadores Valijeros, Talabarteros y de Artículos de Viaje; 1993-2001).

• María Arsenia Tula (Presidenta Honoraria de la Cámara de Comercio, Industria y Producción de la República Argentina; 1992-2003).

• Nelly Perinel (Socia Fundadora de la Cooperativa de Trabajo Química del Sur Limitada).

• Alicia Fondevilla (Ex Presidenta de la Obra Social de Gráficos; 1998-2003).

• Inés Dhighiam Tiraboschi (Subsecretaria General de la Confederación de Empleados de Comercio; años ‘70).

Del Consenso de Washington al Consenso de quito: 2008

El Consenso de Washington estableció, a finales de los años ‘80, un conjunto de recomendaciones referidas a las estrategias de financiamiento para el desarrollo económico y consecuente "derrame" hacia el conjunto de la población.

La "agenda" de Washington se impuso a partir de una red de complicidades locales y externas que obstaculizaron el crecimiento económico, traducido en el cierre de empresas y en la pérdida de fuentes de trabajo e impactando, como siempre, diferencialmente en la vida de las mujeres y de los varones.

En la República Argentina, la gran mayoría de las mujeres de los sectores populares debió hacer frente, sin las herramientas adecuadas, a un mundo laboral dominado por nuevas tecnologías.

Esas mujeres cargaron sobre sus espaldas a sus hijas e hijos y salieron a trabajar fuera de sus hogares, en condiciones precarias, con trabajos informales, inseguros, mal pagos, y sin protección social. Pero ello les permitió ser las proveedoras económicas de sus hogares empobrecidos.

Al mismo tiempo, sus compañeros, desocupados, vieron afectado su rol tradicional, socialmente establecido, de sostenedores económicos de la unidad familiar.

El 6 de agosto de 2007, 34 gobiernos de países latinoamericanos firmaron el llamado Consenso de Quito que constituye un verdadero salto cualitativo en el status de las mujeres al reconocer la paridad entre mujeres y varones como uno de los pilares de la democracia.

Asimismo, reconoció a los Estados como los garantes del ejercicio de los derechos humanos de las mujeres, las niñas y las adolescentes.

El Consenso de Quito estableció como objetivos:

• Garantizar la paridad en la esfera política y mejorar las condiciones laborales de las mujeres a través de diferentes acciones.

• Reconocer el valor social y económico del trabajo doméstico no remunerado que realizan mayoritariamente las mujeres.

• Garantizar el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos.

• Reconocer, valorar y preservar los conocimientos y prácticas de las mujeres para sostener la vida y enfrentar la pobreza.

• Reconocer el valor de la labor de los mecanismos institucionales para el adelanto de la mujer y reconocer al género como dimensión ineludible para la definición e implementación de políticas públicas.

En lo que hace específicamente a las áreas de relevancia de la CTIO, el Consenso de Quito estableció los siguientes acuerdos:

• Fomentar la participación de las mujeres en los espacios de toma de decisión, tanto a nivel local, como nacional e internacional, inspirado en los principios de la paridad.

• Incentivar y comprometer a la prensa en la visibilidad de la mujer en todos sus ámbitos de acción, al mismo tiempo que combatir el lenguaje sexista y discriminatorio por género.

• Adoptar medidas tendientes a la eficaz implementación de las responsabilidades compartidas en la vida laboral y familiar entre varones y mujeres.

• Formular políticas y programas de empleo de calidad y seguridad social e incentivos económicas dirigidos a garantizar el trabajo decente entre mujeres sin ingresos propios.

• Eliminar las condiciones que permiten la perpetuación de la brecha salarial entre varones y mujeres.

• Revisar y armonizar la normativa sobre los delitos de tráfico y trata de personas, tipificar el delito y desarrollar políticas que permitan la prevención del delito y la protección de las víctimas.

Federalización de las acciones de la CTIO

La CTIO tiene como parte de sus objetivos, fortalecer las políticas de federalización sostenidas por el Poder Ejecutivo Nacional.

Entiende al federalismo como doctrina que busca que la nación como entidad política reconozca los derechos y facultades, que han sido expresamente reservados a las provincias, tal como lo ha definido la Constitución Nacional.

Esta idea está asociada al reconocimiento de las libertades y poderes que le son propios a los estados provinciales, lo que implica el respeto a su soberanía, reconociendo la autonomía y las competencias que les pertenecen.

Las Comisiones Tripartitas Provinciales participan con sus demandas y aportes en el diseño del plan de acción de la CTIO nacional y ésta, a su vez, acompaña a cada una de las provincias en la puesta en práctica de sus objetivos.

De esa manera se pueden conciliar intereses, valores, preferencias diversas que son inherentes a cada sociedad, respetando e integrando las políticas a las realidades locales.

Durante la última gestión, desde la CTIO se trabajó intensamente en la conformación de otras CTIO en varias provincias del país, generando redes democráticas de interacción.

Para ello, se realizaron reuniones de articulación con las autoridades locales tendientes a analizar y evaluar la viabilidad de la creación y sostenimiento en el tiempo de las CTIO locales.

Actualmente existen 7 (siete) CTIO provinciales y 1 (una) municipal —en Quilmes, Provincia de Buenos Aires— y se está trabajando en la conformación de CTIO en todo el país.

Creación de la oficina de Asesoramiento en violencia Laboral (OAVL)

Como una de las estrategias tendientes a cumplir con los objetivos de la CTIO se asumió el compromiso de trabajar para erradicar la violencia en el trabajo.

Es por eso que en enero de 2007 se creó, por Resolución del MTEySS N° 05/07, la Oficina de Asesoramiento sobre Violencia Laboral como un ámbito nacional especializado en el abordaje de esta gravísima violación a los derechos humanos de trabajadoras y trabajadores.

Con el objetivo de dar una respuesta jurisdiccional a la atención y derivación de los casos presentados, la OAVL, en el año 2008 comenzó a depender directamente de la Unidad Ministro del MTEySS.

Entre las funciones que cumple la Oficina de Asesoramiento en Violencia Laboral deben destacarse:

• Atender consultas y/o recepcionar denuncias sobre violencia laboral, asesorando en aspectos legales y en lo referente a la salud psicofísica, garantizando confidencialidad en todas las etapas del procedimiento a que se diera lugar.

• Contribuir a la conformación de una base conceptual, empírica, legislativa y documental, atendiendo perspectivas locales, nacionales e internacionales, con el propósito de fomentar el debate, divulgar la problemática y promover la adopción de medidas conducentes a su prevención y corrección en los ámbitos pertinentes.

• Establecer vínculos de cooperación y asistencia con áreas internas del Ministerio de Trabajo, otros organismos públicos y privados, nacionales e internacionales que compartan objetivos similares o complementarios.

• Desarrollar y promover tareas preventivas mediante la realización de actividades de sensibilización, difusión y capacitación sobre el tema hacia diferentes sectores que, en distintas formas, tengan intervención o sean alcanzados por esta temática.

Violencia Laboral (9)

La violencia laboral incluye toda acción, omisión o comportamiento destinado a provocar, directa o indirectamente, daño físico, psicológico o moral a un trabajador o trabajadora, sea como amenaza o acción consumada.

La misma acción incluye violencia de género, acoso psicológico, moral, sexual en el trabajo y puede provenir de niveles jerárquico superiores, del mismo rango o inferiores.

-----------------

(9) Fuente: Violencia Laboral: una amenaza a los derechos humanos, CTIO-MTEySS, Buenos Aires, 2007.

Creación de la Coordinación de Equidad de Género e Igualdad de oportunidades en el trabajo (CEGIOT)

En el 2007, y en concordancia con el espíritu del Consenso de Quito y el compromiso del Ministerio de Trabajo se creó en el MTEySS por Resolución N° 1095/07 la Coordinación de Equidad de Género e Igualdad de Oportunidades en el Trabajo (CEGIOT), que tiene como misión "apuntar desde el área de competencia del MTEySS al cumplimiento de los compromisos asumidos por el Estado Nacional y establecidos en la Constitución Nacional".

Bajo la perspectiva de que la transversalización de género implica incorporar en el diseño de las políticas, diferentes situaciones y necesidades de mujeres y varones, y que la política de género debe ser un elemento estructural que atraviese a todas las áreas, la CEGIOT se propone los siguientes objetivos:

• Transversalizar la perspectiva de género e igualdad de oportunidades en todas las definiciones y acciones políticas del MTEySS, diseñando propuestas de acción para cada uno de los programas ministeriales en ejecución.

• Diseñar instrumentos operativos adecuados a la transversalización de la perspectiva de género y desarrollar mecanismos para el monitoreo y el seguimiento de las políticas del MTEySS.

• Articular acciones con otras áreas y organismos gubernamentales, organizaciones de la sociedad civil y organizaciones de la comunidad, propiciando la conformación de dispositivos intersectoriales y redes que permitan promover el trabajo decente.

• Generar acciones de sensibilización, formación y capacitación que permitan difundir la propuesta e implementar las acciones.

Articulaciones institucionales de la CTIO

La CTIO se ha convertido en un espacio privilegiado para la construcción compartida de propuestas de políticas públicas que hagan realidad la aspiración de igualdad y equidad.

Es por eso que ha trabajado intensamente para articular acciones con diferentes organizaciones sociales y organismos nacionales e internacionales:

• Integra la Coordinación de Comisiones Tripartitas del MERCOSUR y Chile.

• Participa en el Consejo Federal del Trabajo.

• Integra el nuevo directorio del Consejo Nacional de la Mujer.

• Integra el directorio del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).

• Articula con el área de Formación Sindical y Responsabilidad Social Empresaria del MTEySS. Participación en la incorporación de la perspectiva de género en el manual para delegados y delegadas sindicales (OIT).

• Articula con el Programa de Fortalecimiento de los Derechos de las Mujeres "Juana Azurduy", Consejo Coordinador de Políticas Sociales.

• Participa como integrante del Consejo Consultivo del Programa "Las Víctimas contra las Violencias", coordinado por el Ministerio de Justicia.

• Miembro de la Reunión Especializada de la Mujer (REM) del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.

REFLEXIONES DE LOS PRINCIPALES ACTORES

Autoridades del MTEySS A 10 años de la creación de la CTIO

Si tuviera que hacer un balance de las políticas desplegadas por esta cartera laboral en el país, diría que estoy satisfecha en muchos aspectos, especialmente de la lucha que dimos contra el trabajo no registrado, en el que la mujer está muy afectada.

Valoro en particular el énfasis que pusimos en la Comisión Tripartita para lograr la igualdad de oportunidades de todas las trabajadoras y trabajadores.

La OIT insiste en la necesidad de que la mujer tenga en el mundo del trabajo igual remuneración por igual trabajo y sustantivamente las mismas oportunidades.

En el desarrollo de la CTIO se destacan dos aspectos importantes: por un lado haber constituido esta Comisión que funciona armónicamente para debatir todas las temáticas atenientes a la equidad de género en el mundo del trabajo. Por otro, fomentar la sanción de la Ley de violencia laboral.

Cuando vamos a la OIT uno de los temas que permanentemente se discute en las comisiones, es del trabajo de las mujeres y la igualdad de trato. Frente a esta cuestión, se plantearon varias soluciones, una de ellas fue la mayor participación sindical de las mujeres que se tradujo en la sanción de la Ley de Cupo Sindical Femenino.

Dra. Noemí Rial

Secretaria de Trabajo

Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social

Para nosotros el tema de género forma parte del centro de nuestras preocupaciones porque es un componente esencial del trabajo decente, tema directriz en el conjunto de la gestión del Gobierno.

El trabajo decente es nuestro pensamiento central y los temas de género son temas centrales del trabajo decente y a partir de ahí pensamos y actuamos.

No se nos escapa que en este tipo de situaciones las mujeres son más vulnerables. Estamos tratando de enriquecer la negociación colectiva introduciendo los temas de género y de violencia. Tampoco se nos escapa la gran cantidad de mujeres que integran el mercado de trabajo no registrado.

Estamos trabajando en esa área para que los sistemas de cobertura de desocupados/as, puedan extenderse a los trabajadores y trabajadoras no registrados/as.

Dr. Norberto Ciaravino

Jefe de Gabinete

Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social

Durante la década pasada y a partir de la actitud militante de mujeres de distintos sectores, acompañadas desde la Organización Internacional del Trabajo, surgieron en nuestros países del cono sur Comisiones Tripartitas dispuestas a promover el tratamiento de las diversas y extendidas formas que asumía especialmente, en ese contexto, la discriminación del mercado de trabajo en perjuicio de las mujeres.

En aquellos años el Ministerio de Trabajo integró la primera Comisión Tripartita por la Igualdad de Oportunidades y de Trato y ofreció su espacio como sede de trabajo y convocatoria.

Hoy el compromiso con la inclusión de objetivos de equidad de género en las políticas es una decisión institucional y política expresada desde la más alta jerarquía, porque aún en un escenario diferente, las discriminaciones en perjuicio de las mujeres, persisten.

En este escenario, la Comisión Tripartita consolidada, ampliada y fortalecida es el referente desde el cual se promueven los temas más sensibles de la agenda de igualdad de las mujeres y de los sectores que la integran.

Pero además, constituye el ámbito que impulsa la instalación del debate y la consideración de la heterogeneidad territorial de demandas y propuestas en torno al tema de la igualdad y la equidad de género en el trabajo.

A lo largo de estos 10 años la Secretaría de Empleo ha estado cerca de este proceso y en el camino, el diálogo con la CTIO ha generado aprendizajes mutuos que han dado y darán resultados, esperamos, cada vez más fecundos para la situación de las trabajadoras. Para eso estamos trabajando.

Lic. Enrique Alfonso Deibe

Secretario de Empleo

Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social

Los países conciben sus sistemas de seguridad social enfatizando ciertas características. Hasta hace algunos años, la Argentina daba gran importancia a los aspectos contributivos y en este sentido no consideraba aspectos de género en su diseño.

En general se reprodujeron las inequidades del mercado laboral, en donde las tasas de empleo no registrado, de desocupación, de subocupación, inactividad, etcétera, resultan ser mayores para las mujeres que para los varones.

Asimismo, no se han podido resolver las dificultades para que los regímenes de seguridad social reconozcan todo un conjunto de trabajos y tareas que se desarrollan en el ámbito del hogar, incluidas las de reproducción, cuidado de la familia y el autoconsumo.

Estas dificultades resultaron en diferenciales en las tasas de cobertura y en los montos de las prestaciones obtenidas entre mujeres y varones.

En los últimos años se observa una situación muy particular ya que sin haberse propuesto políticas específicas de género, se lograron reducir significativamente las inequidades.

En primer lugar la política de inclusión previsional (moratoria) permitió acceder a prestaciones previsionales a aproximadamente 1.800.000 personas de las cuales un 84% son mujeres, mejorando significativamente las tasas de cobertura específicas.

Posteriormente, la eliminación del régimen de capitalización individual suprimió otra fuente de inequidades para las trabajadoras ya que sus prestaciones se calculaban en función de la esperanza de vida por sexo desde el momento del retiro que es significativamente mayor para las mujeres con el consiguiente impacto en los montos de las prestaciones.

Dr. Walter Arrighi

Secretario de Seguridad Social

Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social

Acerca de la CTIO

El trabajo decente para la OIT es un trabajo de calidad y con Diálogo Social.

La igualdad de género está en el corazón del trabajo decente, ya que no es posible construir trabajo decente si al mismo tiempo no se avanza en la equidad de género.

El hecho de que las Comisiones Tripartitas estén funcionando hace tanto tiempo, que hayan logrado tener una presencia pública, que sean reconocidas como un espacio de discusión para propuestas que contengan la equidad de género en el mundo del trabajo, es algo muy significativo.

María Elena Valenzuela

Especialista Regional en Género y Empleo Oficina Subregional de la OIT (Santiago de Chile)

La creación de la CTIO constituyó un espacio fundamental en la Argentina donde no existía cultura de diálogo.

Cuando surgió la CTIO parecía impensable que pudieran sentarse a hablar y discutir los actores del mundo del trabajo, históricamente enfrentados.

La Cámara Argentina de Comercio (CAC) fue una de las primeras organizaciones en sumarse a la propuesta —junto con la UIA— impulsada desde el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, en el convencimiento de que era necesario que los sindicatos, las cámaras empresariales y el Estado trabajaran conjuntamente para promover acciones tendientes a garantizar la igualdad de oportunidades entre mujeres y varones en el mundo laboral.

La CTIO es un espacio privilegiado que ha permitido demostrar la capacidad de escucha y respeto de las mujeres por las diferencias y de consensuar propuestas políticas que integren las diversidades como una forma de enriquecimiento.

Julita Maristany

Cámara Argentina de Comercio (CAC).

Preside la Comisión Pyme de la CAC e integra la Mesa Ejecutiva

Después de constituida la Comisión, se pensó cómo seguir. Desde la cartera laboral se propuso que se trabajara con los programas de empleo y capacitación que ya funcionaban.

Yo estaba a cargo de un programa para las mujeres que tenía que ver con acciones consideradas femeninas, como el tema salud, cuidado de niñas/os, cuidado social, etc.

Tomamos ese programa, que tenía un presupuesto, y lo adaptamos.

Así, desde la CTIO una de las acciones que se impulsó fue capacitar a las mujeres para desempeñarse en actividades no tradicionales tales como electricidad, albañilería, plomería, pintura de obra, entre otras.

El programa fue un éxito, lo comprobamos al hacer el monitoreo.

Ana María Sampaolesi

Coordinadora de la CTIO

Algunos hechos de relevancia entre 1998 y 2002

El Consejo Nacional de la Mujer ha acompañado a la CTIO desde su inicio.

La construcción de espacios de Diálogo Social que trasciendan los escenarios políticos, las ideologías y enfrentamientos sectoriales, no son fáciles.

Por ello, celebrar los diez años de la CTIO es un motivo que nos llama a valorar y reflexionar sobre la labor de todas y todos las/os que transitaron este camino en los distintos tramos institucionales.

El Estado hoy, a través de una política integral de derechos humanos, es el marco propicio para profundizar mejores condiciones para las trabajadoras y trabajadores para que el trabajo decente sea una realidad.

Lidia Mondelo

Presidenta del Consejo Nacional de la Mujer

La Comisión Tripartita trabaja con los distintos sectores del mundo laboral propiciando el acuerdo, y la política de género: algo que en la mujer es más fácil de comprender, mientras que todavía hay muchos varones que no quieren ni oír hablar de esas cosas.

Lo que nos falta todavía es hacernos valer en la representación de las Cámaras, en el mundo empresarial en general.

Debemos plantearnos que haya más presidentas de empresas.

Durante la gestión del Ministro Carlos A. Tomada al frente del Ministerio de Trabajo es más sencillo tratar temas de género, porque él está claramente interesado en que la igualdad de trato y oportunidades sea un hecho, una política de Estado.

Lic. Stella Quintás

Responsable de la Secretaría de Relaciones Exteriores de la Confederación General de Comercio y Servicios de la República Argentina (CGCySRA)

Etapa de Fortalecimiento de la CTIO

Deseo destacar la labor de la Comisión Tripartita de Igualdad de Trato y Oportunidades entre Varones y Mujeres en el Mundo Laboral (CTIO) del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, por su compromiso y liderazgo en la institucionalización del enfoque de género en las políticas públicas de la Argentina.

Encontramos a la CTIO, a diez años de su creación, consolidada como espacio privilegiado de interacción entre representantes gubernamentales, sindicales y empresariales y desarrollando estrategias tendientes a fortalecer la concertación y el diálogo social, así como la plena participación de la mujer en la vida económica del país en igualdad de condiciones con los hombres, tema fundamental para que las mujeres puedan ejercer con plenitud sus derechos.

Embajadora Magdalena Faillace

Representante Especial para Temas de la Mujer en el Ambito Internacional Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto

Nuestro objetivo de vigorizar el funcionamiento de la CTIO se concretó facilitando el acercamiento de las Comisiones Tripartitas de diferentes países de América Latina, poniendo en contacto a las comisiones tripartitas de Argentina, Chile, Uruguay y Brasil.

No sólo el Diálogo Social caracterizó a la CTIO a partir de 2003, sino también la incorporación de temas específicos que hacen a la dimensión de género en el mundo del trabajo.

Cuando la CTIO comenzó su crecimiento, durante la última gestión directiva, en el Ministerio de Trabajo no existía una Coordinación de Género.

El acceso de las mujeres al trabajo es complicado porque siguen existiendo la doble y triple jornada para las mujeres, y seguirán existiendo en la medida que no se desarrollen políticas para democratizar las relaciones familiares.

María Rigat Pflaum

Directora de Proyectos de la Fundación Friedrich Ebert

La existencia y permanencia de los actores que participan en la CTIO parte de la profunda convicción de que una democracia más equitativa e inclusiva requiere de la capacidad de elaborar estrategias para enfrentar las desigualdades y discriminaciones que también se observan en el mundo del trabajo.

El desafío de la Comisión fue comenzar a garantizar la creación de las condiciones para que la conquista por los derechos de igualdad permitiera avances significativos en la vida cotidiana de mujeres y varones, entendiendo que para ello era indispensable el accionar de un Estado responsable que garantizase la igualdad de derechos y trato en todo el país y que fuese capaz de articular e integrar las acciones aisladas y sectoriales.

Se requirió de diálogo, iniciativas, compromisos, creatividad y fundamentalmente confianza en el hacer colectivo tripartito.

A partir de este proceso iniciado hace algo más de diez años, están dadas las condiciones para comenzar a construir un Plan Nacional de Igualdad de Derechos y Oportunidades, para lo cual deberemos convocar a otros sectores de la sociedad y organismos de gobiernos locales, provinciales y nacionales que aún hoy no participan de este ámbito de trabajo.

Para que este plan sea efectivo será indispensable que contemple las diferencias regionales y sectoriales y que sea capaz de dar cuenta de las mismas; lo entendemos entonces, como una herramienta integral que hará posible la generación de nuevas políticas públicas y la modificación de las existentes.

Alejandra Angriman

Secretaria de Género e Igualdad de Oportunidades de la CTA

Una acción muy importante de la CTIO es haber instalado el tema de la violencia laboral como discusión en el seno de la Tripartita, a tal punto que derivó en la creación de la Oficina de Violencia Laboral en el Ministerio de Trabajo y también otra en la CGT.

Muchas de las temáticas que abordamos en la CTIO han tenido un efecto multiplicador en los gremios, en otros sectores de gobierno, y en las cámaras empresarias.

Cuando se habla de las cualidades que tenemos las mujeres se hace mención a nuestra creatividad para encontrar respuestas eficaces a situaciones que parecen imposibles. Y es verdad.

Esto se demuestra cuando logramos administrar ingresos mínimos para alimentar a nuestras familias, atender a los enfermos y sostener nuestros hogares cuando somos jefas de hogar.

También somos mayoría a la hora de encontrar o "inventar" respuestas para las crisis, somos mayoría en los movimientos colectivos y solidarios para hacer frente y transitar esas crisis.

Somos el sostén de más de la mitad de los hogares argentinos.

Pero todavía estos perfiles participativos no han neutralizado las desigualdades con las que transitamos por el mundo público, el trabajo, la política partidaria, los sindicatos.

Quedan diferencias, que desde la Tripartita luchamos para eliminar, para que se cumpla el principio de igualdad de oportunidades entre mujeres y varones en el mundo laboral en los hechos.

Noé Ruiz

Secretaria de Igualdad de Oportunidades y Género de la Confederación General del Trabajo (CGT)

Acerca de la Memoria y el Reconocimiento

La memoria y el reconocimiento son herramientas indispensables si queremos recuperar nuestro sentido social, la cultura del trabajo y una sociedad cada día más democrática.

La memoria y el reconocimiento aportan a esos valores fundamentales y ese es el sentido, exclusivamente, de este acto.

Cuando el 1° de mayo de 2006 inauguramos la muestra fotográfica que todavía hoy está en la puerta del ministerio, lo hicimos por el reconocimiento de las mujeres trabajadoras y para que recordemos a las mujeres que lucharon, que trabajaron cotidianamente para hacer realidad la frase que preside la muestra: construir un trabajo digno es también historia de mujeres.

La población económicamente activa son 16 millones de personas, de los cuales 9 millones son varones y 7 millones son mujeres.

Esto quiere decir claramente que cuando nosotros consideramos los proyectos y las necesidades de las mujeres, transversalmente en todas las políticas públicas, estamos haciendo política para mayorías.

Políticas para 7 millones de mujeres, y eso está presente cuando pensamos en políticas vinculadas a las dificultades para la inserción en el primer empleo para jóvenes.

Cuando pensamos en políticas en contra del trabajo no registrado; cuando pensamos en políticas para las mujeres que trabajan en defensa de sus derechos; cuando recordamos las organizaciones sociales que recuperaron empresas que habían sido abandonadas, para defender la dignidad del trabajo; y cuando pensamos en políticas para aquellos que tienen capacidades diferentes y demuestran sus desempeños eficientes en los empleos.

En cada una de esas oportunidades nosotros debemos y podemos pensar en estas políticas porque estamos convencidos de que las políticas con perspectiva de género realmente contribuyen a alcanzar objetivos de inclusión social.

Nuestro plan, nuestra consigna de más y mejor trabajo para todos, es una consigna que se cumple e incluye a las mujeres.

Cuando pensamos que la centralidad del trabajo debe ser tomado como el eje estructurante de la inclusión social, estamos pensando que hay que promover la participación de las mujeres en el mundo laboral.

Sólo así le damos contenido y sentido a esta política de recuperación de la cultura del trabajo para todos y todas. Creo que es justo y oportuno que hagamos este homenaje, insisto, porque la memoria y el reconocimiento es lo que nos va ayudar a hacer una sociedad más igualitaria.

Dr. Carlos Tomada

Ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social

Del Consenso de Washington al Consenso de quito: 2008

En el contexto de la experiencia neoliberal, la difusión de valores competitivos e individualistas contempló el retroceso de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales como una profecía neoliberal indiscutible.

Paralelamente, los Estados claudicaron en su rol de garantes de políticas sociales para ofrecer un terreno propicio a la nueva geografía "globalizada" del mercado.

Como resultado, América Latina produjo en las dos últimas décadas más pobreza que en toda su historia (mayor desempleo, precariedad de vivienda, baja calidad educativa y en prestación de salud, etc.).

Hoy está puesta la mirada en el Estado como responsable de dinamizar y hacer efectivos estos derechos.

El espacio conformado en la CTIO es una herramienta valiosa para dinamizar el intercambio fructífero entre sectores a fin de consensuar estrategias para el ámbito laboral, articuladas en beneficio de la equidad e igualdad de oportunidades, principios fundamentales de los Derechos Humanos.

La CTIO nuclea actores fundamentales que a través de su participación, hacen un ejercicio de reflexión sobre los DDHH, situado en los problemas en los que cada uno/a debe estar comprometido en tanto parte de una sociedad y de una cultura para construir más democracia y extender las fronteras de la universalidad.

Graciela Vargas

Asesora sobre Género

Secretaría de Derechos Humanos de la Nación

Federalización de las acciones de la CTIO

Un aspecto muy importante desarrollado en la etapa iniciada en el año 2003 es la conformación de comisiones tripartitas provinciales y municipales, que es trascendental.

Cada zona, cada región, tiene actitudes diferentes, sobre todo en lo que a temas de género se refiere. La llamada federalización de la Tripartita permitió, ampliar la mirada del mundo laboral.

Dentro de la CAME —que nuclea 960 cámaras de Ushuaia hasta la Quiaca, todas ellas PyMEs— en 2008 se creó la Secretaría de las Mujeres.

En diciembre, convoqué a una reunión de mujeres empresarias PyMEs. Esa primera vez tuvimos sorprendentemente 270 mujeres presentes con una convocatoria de una semana.

Era evidente que las mujeres necesitaban un ámbito propio para poder hablar, expresarse y manifestar sus opiniones más libremente.

De esa primera experiencia nació la rama de mujeres y esto surgió, debo subrayarlo, como producto de mi vínculo y los encuentros periódicos que tengo con la Comisión Tripartita.

Elina Stewart

Presidenta y Prosecretaria de Hacienda de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME)

Desde 2004 las entidades empresarias hemos venido poniendo de manifiesto tanto los aspectos de nuestro sector que requieren políticas activas de acompañamiento y fortalecimiento, como el significado que tiene la incorporación de la perspectiva de género, dada la participación de las mujeres en el sector emprendedor.

La experiencia de nuestra organización nos permite aportar a la mesa de debate y propuestas de la CTIO, desde las particularidades, debilidades, necesidades y potencialidades de las unidades económicas más pequeñas.

Queremos destacar que la decisión de propiciar la apertura de CTIO’s municipales, evidencia una vez más nuestras coincidencias en la perspectiva y estrategia de avance, y profundiza la activa participación que nuestra Cámara ha tenido durante estos años de fructífero trabajo conjunto.

Rodolfo Raffo

Presidente de la CADE (Cámara Argentina de Emprendedores)

Liliana Mayoral

Directora de Comercialización de la CADE

Creación de la oficina de Asesoramiento en violencia Laboral (OAVL)

Como Mujeres Federadas de la Federación Agraria Argentina, formamos parte de esta CTIO, en estos diez años hemos sido partícipes de los logros obtenidos, especialmente de la Ley de Violencia Laboral, y del traslado de la experiencia de la CTIO a varias provincias.

Un trabajo integral en formación, diversidad, información, articulación, acción, pero por sobre todas las cosas, un ámbito más donde desarrollarnos como dirigentas/es agrarias, en un año de lucha para poder sostenernos como agricultoras/es familiares.

Es precisamente en esa lucha con firmeza donde nos sentimos plenamente identificadas para resistir y lograr así los objetivos trazados, tal como lo ha venido logrando la CTIO.

Mónica Polidoro

Coordinadora Nacional de Mujeres Federadas de la Federación Agraria Argentina

Articulaciones Institucionales de la CTIO

Celebramos estos 10 años de la Comisión Tripartita como propios por nuestro trabajo compartido y por la alianza estratégica entre ambos espacios gubernamentales con altísimo grado de participación social plural.

En estos últimos años de gestión al frente del INADI en conjunto con la Tripartita hemos impulsado el proyecto de Ley de Violencia Laboral y el de Cupo para Mujeres en cargos de Decisión en Empresas.

Tras 25 años de vida en democracia, la paridad laboral entre mujeres y varones sigue siendo una asignatura pendiente.

Vamos a redoblar los esfuerzos para hacer juntas, campañas en el ámbito de la educación para romper la división sexual del trabajo en las carreras y las distintas profesiones.

Vamos a impulsar desde la Red de Empresas por la Diversidad la Certificación de Equidad de Género para que las empresas adviertan que lograr la paridad de género redunde en un beneficio para ellas mismas.

Vamos a contribuir al fortalecimiento de las mujeres en el movimiento sindical porque ellas son las verdaderas protagonistas del cambio por venir.

María José Lubertino

Presidenta del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI)